Emotiva boda en la cueva de las Ventanas de Granada
- 08/08/2016
Hay bodas que marcan, emotivas, diferentes y esto se ha convertido en nuestra pasión y forma de vivir como documentalista de bodas nacional, afincados en Granada, un término que se usa para contar una boda desde el sentimiento, buscando emocionar y plasmar magia que rodea un día tan especial.
El caso de hoy es anecdótico, poder ser testigos de la ceremonia de 2 jovenes que se aman con locura, se conocían desde la infancia y durante esos años surgió el amor, un amor que se confirmó con esta gran boda.
Piñar se encuentra en la Comarca de los montes orientales, enclavado en plena Sierra Arana, a 45 km de Granada Capital. Pueblo con una historia sorprendente y milenaria en el que habitaron multitud de culturas y razas, desde los Neardentales ha romanos, nazaries, Arabes, y cristianos hasta hoy.
Aquí nacen nuestros protagonistas, Antonio y Laura, una joven pareja de 23 años, que nos hizo emocionarnos hasta nosotros, Conchi Narvaez, nuestra compañera profesional de fotografía de bodas, y el equipo de Hangar43: Vídeo Granada.
Antonio es una persona que se emociona facilmente y si a eso se le añade el cariño y amor que le tiene su familia y amigos, es la unión perfecta para crear ese documental de boda que tanto buscamos, conseguir plasmar las emociones, risas ilusión que se vive en una boda.
Que decir de Laura y su familia, son personas llenas de vitalidad, alegria, de forma inconsciente nos regalaba momentos únicos buscando captar emociones, sorprender con cada imágen y proporcionar el mejor de los recuerdos, así como la cercanía con los novios y la personalización de cada trabajo para que se sientan únicos y especiales en el que tomamos oportunidad de filmar para crear un vídeo documental de boda muy especial.
No hay dos bodas iguales, como no hay, tampoco, dos novias iguales. Algo que queda patente cuando filmamos en el mismo lugar, y muy especialmente cuando se trata de un sitio con mucho carácter que por norma debería impregnar cada rincón de la boda. En este tipo de lugares no resultan fáciles de encontrar precisamente por la poca flexibilidad que los espacios históricos suelen tener a la hora de adaptarse a las bodas que aún no hemos visitado. Y en este caso podemos decir que tras muchos años dedicados a este maravilloso mundo, nunca habiamos tenido la oportunidad de filmar en un lugar tan sorprendente como es la Cueva de las ventanas, en Piñar, donde se realizó la ceremonia.
La Cueva de las Ventanas es un lugar fascinante, el hecho de filmar en un espacio con tanta historia, tantos recuerdos por el que han pasado generaciones. Aquí en este grandioso lugar se dieron el Sí, quiero Antonio y Laura ante sus familiares y amigos, una boda que cautivó nuestros corazones y de los asistentes, una ceremonia realmente emotiva.
Es aquí, en la cueva donde aprovachamos para realizar una sesión de exteriores, un vídeo de postboda que enriqueciera su boda aún más. Aún nos sorprendía la gran conexión que hay entre ellos, su buen humor y la forma en la que se demuestran el amor que tienen el uno por el otro.
Sonrisas, risa nerviosa, lágrimas, sorpresa, admiración, orgullo, emoción… es todo lo que esperamos haber conseguido captar en nuestras cámaras para ofrecer un documental de boda que llegue al corazón. Sin duda nosotros como fotógrafos y videografos de boda ha sido una experiencia inolvidable que sin duda recordaremos para siempre y que ahora nos toca mostrar antes todos vosotros nuestro buen hacer.
Gracias Antonio y Laura por formar parte de este día tan especial y emotivo. Os deseamos una vida llena de felicidad y amor verdadero.